"Jamás pudo quitarme el fiero Marte,
por más que en su ejercicio me ha ocupado,
que en medio de su furia no haya dado
a Apolo de mi tiempo alguna parte;"

Hernando de Acuña

Hernando de Acuña nació en 1518 en Valladolid, España.

Familia

Fue el quinto hijo de los siete de Leonor de Zúñiga y de Pedro de Acuña, llamado el Cabezudo, ambos descendientes de familias nobles.

Militar

En septiembre de 1536, se incorporó en el ejército imperial de Carlos I y combatió como soldado en Italia bajo las órdenes del marqués del Vasto junto a su hermano Pedro, capitán de infantería. Los hermanos tomaron parte en diversas acciones militares, entre ellas la guerra del Piamonte, donde Pedro murió.


En 1542 fue nombrado gobernador del castillo de Cherasco. Dos años después cayó prisionero de los franceses en la batalla de Ceresola, permaneciendo cuatro meses en la cárcel de Narbona. Tras ser liberado se le nombró gobernador de la ciudad de Cherasco, cargo que ocupó hasta 1546.

Posteriormente combatió en Alemania. Durante años fue uno de los colaboradores más cercanos del monarca, que le otorgó la Orden de Alcántara.

También formó parte del ejército de Felipe II y luchó en la batalla de San Quintín (batalla entablada el 10 de agosto de 1557 entre las tropas del imperio español y el ejército francés, con victoria decisiva para España).

Poeta petrarquista

Durante su estancia en Italia, además de participar en el ejército escribió poesía. Su obra fue una de las más destacadas de la primera generación de poetas petrarquistas (corriente estética que imita el estilo, las estructuras de composición y la imaginería del poeta lírico italiano Francesco Petrarca), de la que también formaban parte su amigo y compañero de armas Garcilaso de la Vega, Gutierre de Cetina y Garcilaso de la Vega el Inca, entre otros.

Poemas

A este periodo corresponden los poemas más antiguos que se conservan del autor, en los que narra los amores de Silvano con Silvia y de Damón con Galatea, los poemas dedicados al marqués del Vasto y otros como los sonetos escritos «en prisión de franceses».

Conocido por sus églogas, madrigales, elegías y sonetos, entre los que destacan la Fábula de Narciso o la Contienda de Ayax Telamonio y Ulises.

Su verso más citado y el que le dio fama fue «Un monarca, un imperio y una espada», endecasílabo que figura en el soneto «Al Rey Nuestro Señor» en honor a Carlos I.

Traductor

Obtuvo un profundo conocimiento de la lengua italiana y del latín, fundamentales en sus futuros trabajos y para las numerosas traducciones que llevaría a cabo en su vida de obras clásicas como las Heroidas, de Ovidio y Orlando el enamorado y el Caballero libertado, de Oliver Marche.

Matrimonio

Sobre 1560 se retiró de la vida militar y regresó a España, donde contrajo nupcias con su prima Juana de Zúñiga. Se instalaron en Granada dedicándose desde entonces a la lírica exclusivamente.

Muerte

Hernando de Acuña falleció el 22 de junio de 1580 en Granada, España.


En 1591 su viuda publicó su obra Varias poesías compuestas por don Hernando de Acuña.

*buscabiografias.com

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